6to Encuentro de Exvoluntarios
(Tijuana, B.C. 28 de julio de 2015) — Ellos fueron voluntarios. Llegaron hasta Tijuana desde Estados Unidos, España y México para trabajar en favor de los jóvenes. Y los pasados 24, 25 y 26 de julio regresaron a la obra salesiana de la ciudad fronteriza para realizar el VI Encuentro de Exvoluntarios Salesianos de Tijuana.
Todo comenzó el viernes 24 de julio. Los exvoluntarios se dieron cita en la casa salesiana, donde fueron recibidos por el P. Felipe de Jesús Plascencia Botello SDB, director de la obra salesiana de Tijuana, quien dio la bienvenida a los asistentes y compartió las anécdotas de los inicios del voluntariado en esa obra. Después vinieron un momento de oración, luego un espacio para la convivencia y la cena, para luego dar pie a las buenas noches, momento en el que los exvoluntarios se presentaron con los salesianos y voluntarios que actualmente trabajan en el Proyecto Salesiano Tijuana, A.C.
El sábado la jornada arrancó muy temprano. A las 7:00 horas se reunieron todos en la capilla para el momento de oración en comunidad; a las 7:30 am ya les esperaba el desayuno. Una vez finalizado, salieron con rumbo al oratorio La Lupita para participar en el retiro, preparado por el P. Felipe Plascencia, SDB, que comenzó a las 9:30 con un momento en el que los exvoluntarios abrieron su corazón y compartieron sus sentimientos al volver, después de tanto tiempo, y conocer los frutos de su trabajo.
El retiro se dividió en tres etapas. La primera se trató sobre cuál es el momento actual de su vida: la situación familiar, social, laboral y espiritual; en la segunda se profundizó sobre los momentos más sobresalientes de su voluntariado, desde cuando sintieron el llamado para vivir esta experiencia, así como los diversos momentos vividos —tanto alegres como los difíciles— y las personas que estuvieron ahí para apoyarles; finalmente, el tercer momento fue de reflexión: se les invitó a leer dos textos, uno de Memorias del Oratorio, donde Don Bosco descubre su vocación visitando las cárceles de Turín, y otro sobre un fragmento del documento del Papa Francisco sobre el año jubilar de la Misericordia, que iniciará el 8 de diciembre de 2015, día de la Inmaculada. Al término de estas dos lecturas y del momento de reflexión, vino el momento de compartir su conclusión y donde los participantes contaron qué semillas sembró Dios en su corazón al vivir el voluntariado, cómo influyó éste en su vida actual y cómo implementar lo que ha fructificado en ellos hacia su vida y hacia la iglesia.
Los exvoluntarios volvieron a la obra salesiana de Tijuana y vieron cómo han cambiado las cosas
Para finalizar, a las 5:00 pm tuvo lugar la celebración de la misa en la capilla del oratorio, para después realizar la visita al Oratorio Domingo Savio, donde los exvoluntarios fueron recibidos por la comunidad. Ahí les presentaron las actividades que actualmente se llevan a cabo, se realizó un recorrido por las instalaciones y finalizaron en la capilla donde, todos juntos, dedicaron un momento de oración y cantos marianos. A las 8:30 pm se despidieron y regresaron a la casa salesiana.
El último día, el domingo 26, se realizó la visita al oratorio San José Obrero, donde fueron recibidos por el P. Federico Mújica, SDB, quien les mostró el oratorio y las diversas actividades que se realizan, así como los proyectos futuros para el bien de los jóvenes de la comunidad. Luego partieron al Oratorio Don Bosco, donde jóvenes animadores les recibieron y compartieron un momento de convivencia en el comedor del oratorio. Después de esto regresaron a la casa salesiana para la misa de clausura, que fue presidida por el P. Felipe Plascencia, SDB. La homilía versó sobre la importancia de que, a través de multiplicar nuestras acciones a favor de la iglesia y de la obra salesiana, más jóvenes serán guiados por el buen camino y por consecuencia se obtendrá la salvación de sus almas.
El broche de oro del encuentro llegó a las 3:00 pm con la comida de despedida y la toma de fotografías con la imagen de Don Bosco.
El encuentro de exvoluntarios tiene por objetivo fortalecer los lazos con los antiguos voluntarios de la obra salesiana de Tijuana para que, con motivo del Bicentenario de Don Bosco, se renueve el compromiso de trabajar siempre con los jóvenes y para los jóvenes, recordando aquellas experiencias que marcan la vida, y que siempre dan una nueva visión a nuestra realidad y que tienen como consecuencia un crecimiento moral, pero sobre todo espiritual.
